EVANGELIO
A todos los que encontréis, convidadlos a la boda
Del Evangelio de san Mateo 22,1-14
Un rey dijo a sus criados: "La boda de mi Hijo está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis, convidadlos a la boda."
Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales.
COMENTARIO:
Jesús, para expresar lo que es el reino de Dios, usa la comparación del banquete. El banquete es la imagen de: la abundancia de comida y bebida, de la alegría y la fiesta, de la plenitud, de la satisfacción, de los deseos cumplidos, de la hermandad y de la gratuidad.
El reino de Dios es eso: abundancia, fiesta, fraternidad y, ante todo, gratuidad. Somos invitados. Entonces y ahora. No podemos olvidarlo. Estamos invitados a un banquete.
La invitación aunque es gratuita no debe degenerar en descortesía e irresponsabilidad.. La gratuidad de Dios reclama nuestra responsabilidad
ORACIÓN
Gracias Señor por tu invitación a compartir comida y comunicación, abundancia de vida y fiesta desbordante.
Gracias porque en el banquete todos confraternizamos, y crecemos en comunión.
Gracias Señor por cada Eucaristía que es un anticipo del Banquete eterno que nos has preparado en Cristo tu Hijo.
No permitas Señor que tu invitación degenere por mi parte en descortesía o irresponsabilidad sino que me lleve a mi propia plenitud.
Añadir nuevo comentario