EVANGELIO
Mis ojos han visto a tu Salvador
Del Evangelio de san Lucas 2,22-40
Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: "Todo primogénito varón será consagrado al Señor", y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: "un par de tórtolas o dos pichones."
Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba.
COMENTARIO
Hoy es el día en que Jesús fue presentado en el templo porque él era “el consagrado al Señor” y en el templo se encuentra con el pueblo creyente.
Impulsados por el Espíritu Santo, llegaron al templo los santos ancianos, Simeón y Ana, que, iluminados por el mismo Espíritu, conocieron al Señor y lo proclamaron con alegría.
De la misma manera nosotros, congregados en una sola familia por el Espíritu Santo, vayamos a la casa de Dios, al encuentro de Cristo. Lo encontraremos y lo conoceremos en la fracción del pan hasta que vuelva revestido de gloria.
ORACIÓN
Padre, créanos de nuevo a través de tu hijo Jesucristo. Libéranos de lo que nos ata.
Envíanos tu Santo Espíritu para que ESTEMOS CONSAGRADOS A Ti Señor y tu Espíritu nos ayude a compartir tu trabajo de consagrar nuestro mundo a tu santo nombre.
Llevados a tu presencia por María la Virgen y San José conságranos para vivir tu Palabra más profundamente.
Señor, que hoy pueda consagrar mi tiempo, mi entendimiento, mi voluntad y todos mis deseos a tu Santo nombre.
Añadir nuevo comentario